MiLanzarote ha quedado encantado con las fiestas de este año. Intrépido como siempre nos ha dejado claro que "han sido las mejores fiestas de la historia de la ciudad", así me gusta él, torero. Tan sólo ha bajado la participación en el baile de casetas, un 3% menos, al que hemos contribuido Misombra y yo. Este año boicot, ni una raspa de beicon con Cigales.
Como sólo trabajamos los pinchos de "a cubierto" nos apuntamos a la ruta jacobea del Vino Diario al Majuelo, y vuelta. Lo peor es que no gano para el tinte. En cada parada una manchita de salsa, aceite... tiene la habilidad de chocar con mi ropita sin que los caballeros inexistentes se comporten como mandan los cánones.
Al amigo invisible le cae una mácula de café con leche en el traje, y toda la plana mayor femenina de la notaría se vuelca con la manchita: que si le froto con esto, que si le soplo delicado, que si una pizca de agüita... Y él escapa trastabillando, con las manos mudas y cara de farolillo rojo. ¡Dios, qué país tan mal repartido! Ya lo la dicho Díaz Ferrán: hagamos un paréntesis en el libre mercado, qué intervenga el Gobierno.
¿Cuál fue el pincho de Ferias favorito de MiLanzarote? Banderilla de lagarto con espuma presumida me susurra Misombra que aprovecha cualquier momentito para hacerse notar –un clásico.
No hay comentarios:
Publicar un comentario